miércoles, 22 de febrero de 2017

Un intento para definir la fotografía (Sobre la fotografía de Susan Sontag)

El libro "Sobre la fotografía" de Susan Sontag me gustó mucho pues abarca varios puntos de vista sobre la fotografía. Podría decirse que es una explosión de conocimiento sobre el tema. Fue muy interesante ya que no había leído antes sobre éste tema y es un gran primer acercamiento. Te da muchas referencias para revisar así como también me dejó reflexionando a lo largo del libro.

En la primera página Sontag hace referencia a la Caverna de Platón mencionando cómo la fotografía cambia totalmente la percepción que tenemos del mundo. Ella lo llama "un nuevo código visual" y, como éste nos enseña "lo que vale la pena mirar". Hacia el final de la página, me encantó su frase explicando, cómo la fotografía nos hace pensar que podemos conocer todo el mundo en la cabeza; "una antología de imágenes." Ésta parte me hizo reflexionar sobre el uso cotidiano que le damos a las fotografías, Todos los días millones de fotos son subidas a redes sociales, desde una selfie, hasta la comida de ese día o un paisaje hermoso. Lo que hace más real el poder conocer todo el mundo con la cabeza. Si queremos ver un lugar en Irlanda sólo tenemos que escribirlo en el buscador de Google. Lo que me lleva a otra frase de Sontag : "Las fotografías son miniaturas de realidad que cualquiera puede hacer o adquirir."

Ésto me remonta a la época de Sontag y de los fotógrafos que menciona. A la época dónde mandar postales era de lo más común. Y justo me lleva  a pensar en una fotografía impresa, cómo eso ya es un objeto que adquirimos. Pero hoy ni si quiera eso, hoy en día las tenemos digitales en nuestros teléfonos. Y no sólo una o dos, Tenemos al alcance miles de fotografías, miles de miniaturas de realidades distintas. Sin embargo no podemos conocerlo totalmente. Podemos saber como se ve la muralla China, pero no sabemos que es estar ahí; a qué huele, que temperatura hay, no podemos tocarla. No podemos tener esa experiencia, pero si podemos hacer una descripción de cómo se ve, cuanto mide, de que material es. Y eso me recuerda a lo que menciona Sontag, "una fotografía es a la vez una pseudopresencia y a la vez un signo de ausencia."

Posteriormente Sontag comienza hablar del surrealismo en la fotografía y del fotógrafo.
Se me hizo muy interesante como ella habla del fotógrafo. "El fotógrafo es una versión armada del paseante solitario que explora, acecha, cruza el infierno urbano." . Me hace pensar en estas fotos que llegamos a ver de zonas urbanas. Las personas, los edificios y es por eso que la frase toma mayor significado para mi cuando comienza a citar a distintos fotógrafos como Berenice Abbott.
Abbott menciona que su propósito era registrar su ciudad antes de que cambiara por completo, por lo que Sontag la compara con Arget en París.
Pero al final creo que es una de las razones por las que tomamos fotografías. Es una generalidad tener resistencia al cambio y por eso buscamos conservar las cosas como son. Congelar ese momento, antes de que cambie, generando incluso cierto sentimentalismo, como lo menciona Sontag, ante las fotografías.
Todos hemos tenido la experiencia de que los abuelos o tíos saquen el álbum familiar o la caja de fotografías para enseñarnos como eran de jóvenes. Como era la casa en donde vivían, la familia o su esposa o esposo de cuando recién se casaron. Añorando ese pasado. La abuela diciendo frases como "Era tan guapo de joven". Validando algo hermoso y recordando ese momento. Lo que me lleva a la siguiente pregunta.

 ¿A qué le tomamos una fotografía? A algo bello. Sontag te deja reflexionando sobre este tema cuando nos menciona que la cámara en se ha tomado como medida de lo bello. Y es verdad.
Usualmente cuando vamos caminando por la calle y vemos algo bonito tenemos el impulso de sacarle una foto. A menos que la intención sea retratar la belleza de algo feo, siempre encontramos algo bello en las fotografías. A menos que la intención sea documentar aspectos sociales, como es la fotografía periodística que genera imágenes tan famosas, como menciona Sontag, como la niña corriendo a lo largo de carretera quemada por el Napalm. O un ejemplo más actual, tenemos las fotografías tomadas en Siria.
Éstas imágenes no son bellas, son crudas, son explícitas. Y cuando veo éste tipo de imágenes me viene a la mente lo que dice Susan al principio del libro, cuando menciona la fotografía de la guerra de Vietnam: "Las fotografías no pueden crear una posición moral, pero sí consolidarla y contribuir a la construcción de una."
Precisamente por éstas imágenes nos hacen reflexionar sobre conflictos sociales para poder tomar una postura. Si los ciudadanos de Estados Unidos no hubiera visto éstas imágenes no hubieran hecho marchas en contra de la guerra de Vietnam. Y tenemos mil ejemplos de cómo este tipo de imágenes ayudan a crear una posición moral y una reflexión. Sin embargo yo me apego a lo que dice Sontag sobre la fotografía siendo una interpretación de la realidad.
Y por eso me parece tan interesante la problemática que se plantea en el libro entre la fotografía y la pintura. La veracidad entre las dos. Sontag dice que si una pintura se falsifica afecta a la historia del arte, pero si falsificamos una fotografía estamos alterando la realidad. Y tenemos varias fotografías "periodísticas" en las redes que son manipuladas, creando realidades falsas. Por lo que me parece importante señalar el uso que tienen las fotografías, cuál es el propósito de tomarlas.

Por otro lado, me encanta lo que señala el libro sobre la visión fotográfica. "La visión fotográfica tiene que ser renovada constantemente con nuevos choques." Es una frase que hace completo sentido, sobre todo cuando la tomamos ya como una bella arte. En la pintura todo el tiempo una vanguardia rompe a la otra, la contradice. Y lo mismo debería suceder con la fotografía, pues así esta todo el tiempo evolucionando y creo que es lo bello del arte en general. Que a lo largo del tiempo podemos ver los cambios que fueron sucediendo en la forma de ver o pensar de los artistas. Como cuando vemos la fotografía que hace Diane Arbus, comparada con la de Edward Weston o Berenice Abbott. Son muy distintas, y buscaban mostrar aspectos diferentes.

En el capítulo de Evangelios Fotográficos, mi frase favorita es por Ansel Adams: "Una gran fotografía tiene que ser una expresión cabal de lo que se siente en el sentido más profundo sobre lo que se está fotografiando, y es por lo tanto, una expresión auténtica de lo que el individuo siente sobre la vida en su totalidad."
Esto lo puedo relacionar respecto a lo mencionado por Thoreau sobre la "visión no divorciada de los otros sentidos". Precisamente porque a mi punto de vista, al estar tomando una fotografía, tenemos que tener todos nuestros sentidos en el momento; en la experiencia que estamos intentando retratar. Por lo que me parece acertado lo que menciona Cartier Bresson, se piensa antes y después de la tomar la fotografía, nunca cuando se esta tomando.

Para mi creo que la fotografía es una interpretación de la realidad y es una expresión de la experiencia que se está retratando.
Al final creo que es complicado sacar una definición un tanto dogmática de la fotografía. Si bien podemos tomar aspectos generales que nos permite entender en general qué es la fotografía, creo que cada fotógrafo tiene su definición propia, incluyendo cuál es su objetivo o propósito al crear imágenes. Y es parte de la diversidad de imágenes que terminamos conociendo, y las distintas formas de interpretar la realidad creo que lo hace aún más grande y maravilloso.



domingo, 5 de febrero de 2017

Visitando un taller de gráfica

El viernes la maestra Silvia nos llevo a un taller profesional de gráfica en la colonia Doctores.
Fue muy interesante ir porque el taller era enorme y muy bonito. Tenía tres pisos en lo que combinaba talleres digitales y de impresión digital, con un taller de gráfica tradicional y una sección de carpintería.

El artista nos contó como era el proceso de sus piezas, el hacía lasergrafía. Nos comentaba que diseñaba primero usando programas básicos en una tablet para sacar un patrón como el de los mandalas y posteriormente hacía un diseño con ese patrón en otro programa. Al tener finalizada la imagen la imprimía en una placa de madera con un láser.
Otro material con el que trabajaba mucho era con los filamentos para hacer impresiones 3D. Igual modelaba las piezas en la computadora y luego las imprimían en la impresora 3D que tienen en el taller.

Fue muy interesante ver como este artista mezclaba la tecnología con técnicas tradicionales de gráfica para hacer sus piezas e incluso rozaba un poco en el campo de el diseño.
Incluso nos contaba una de sus ayudantes que cuando se descompuso el baño diseñó una de las piezas que se rompió en el baño, la imprimieron en 3D y repararon el baño.

Me gusto mucho conocer más posibilidades de como poder desarrollar un proyecto que integre diferentes áreas como son los métodos tradicionales y la tecnología.

Dejó en la parte posterior algunas fotos que pude tomar en el taller.